Estimula el desarrollo del lenguaje: La exposición temprana a libros y cuentos ayuda a desarrollar las habilidades lingüísticas de los niños. Escuchar historias les permite familiarizarse con nuevas palabras, estructuras gramaticales y vocabulario, lo que beneficia su capacidad para comunicarse.
Fomenta la imaginación y la creatividad: Los libros infantiles suelen presentar mundos imaginarios y personajes fantásticos, lo que estimula la creatividad y la capacidad de imaginación de los niños. Esto es esencial para el desarrollo de habilidades de resolución de problemas y pensamiento abstracto.
Desarrolla habilidades cognitivas: La literatura infantil a menudo implica la identificación de patrones, la comprensión de la secuencia de eventos y el reconocimiento de personajes. Estos elementos contribuyen al desarrollo de habilidades cognitivas, como la memoria, la atención y el razonamiento.
Promueve el amor por la lectura: La exposición temprana a libros puede crear una conexión positiva con la lectura, fomentando el amor por los libros y estableciendo las bases para un hábito de lectura a lo largo de la vida.
- Facilita la adquisición de conocimientos: Los libros infantiles a menudo abordan conceptos educativos y proporcionan información sobre el mundo que rodea a los niños. Esto contribuye a la adquisición de conocimientos y a la comprensión de conceptos básicos.
Desarrolla habilidades sociales y emocionales: Muchas historias infantiles abordan temas como la amistad, la empatía, la resolución de conflictos y las emociones. Al explorar estas temáticas, los niños desarrollan habilidades sociales y emocionales importantes.
Fortalece el vínculo entre padres e hijos: La lectura compartida crea momentos especiales entre padres e hijos, fortaleciendo los lazos afectivos y proporcionando oportunidades para el diálogo y la interacción.
Promueve la atención y concentración: Escuchar o participar en la lectura de cuentos puede ayudar a los niños a desarrollar la
capacidad de atención y concentración, habilidades esenciales para el aprendizaje.
Al seleccionar libros para la educación inicial, es crucial elegir aquellos que sean apropiados para la edad, visualmente atractivos y que aborden temas relevantes para el desarrollo de los niños. Además, la participación activa de los adultos, ya sea a través de la lectura compartida o la creación de actividades relacionadas, mejora aún más los beneficios de la literatura infantil en la educación inicial
REFORZEMOS MEDIANTE LA OBERVACIÒN DE UN VÌDEO.
(S/f). Edu.ec. Recuperado el 4 de enero de 2024, de https://evirtual.espe.edu.ec/programas_scorm.cgi?id_curso=24948&id_unidad=284772&id_pkg=136092&wAccion=ver_scos
